Tu piel es tu carta de presentación y si has decidido mejorar su aspecto, empieza por darle los cuidados básicos para un rostro bello, joven y sano.
En el mercado encontrarás un sinnúmero de productos y tratamientos costosos para el cuidado de la piel, o bien, cosméticos que enmascaran las imperfecciones del rostro sin realmente ayudar a solucionar el problema.
Demi Moore, actriz norteamericana habla al respecto:
“Si te enfocas en un buen cuidado de la piel, en realidad no necesitas mucho maquillaje.”
¿¡Qué tal!? No podríamos estar más de acuerdo. Empieza entonces por seguir buenos hábitos para el cuidado de tu piel.
¿Cuáles son los cuidados básicos para un rostro bello?
Antes de aplicar algún producto o tratamiento, sigue estas recomendaciones que a largo plazo te ayudarán a lucir una piel radiante no sólo para tu cara, sino también para todo tu cuerpo.
- Hidrata tu cuerpo con agua y otros líquidos sin azúcares como los tés, por ejemplo el té verde que tiene antioxidantes y ayuda a prevenir el envejecimiento.
- Lava tu rostro con agua tibia dos veces al día: por las mañanas y antes de dormir (ve aquí recetas naturales para limpiar tu cara). Te recomendamos los jabones neutros y aquellos de la marca LUSH, creados en Inglaterra, que utilizan ingredientes naturales y promueven además la lucha contra la prueba en animales.
- Humecta la piel de tu cuerpo (cara, cuello, manos, pies, rodillas) después de lavarla, ya que los jabones resecan tu piel y alteran su pH. Ve remedios naturales hidratantes.
- Come sanamente para tener una piel joven y luminosa. Incluye en tu dieta alimentos con antioxidantes y vitamina C que ayudan a retrasar el envejecimiento.
- Protege tu rostro del sol usando lentes (piel alrededor de los ojos), sombreros y aplicando algún bloqueador solar en cara y el resto de tu cuerpo.
- Protege tus manos del jabón, humectándolas durante el día con algún aceite natural, humectante y guantes (cuando sea posible). Ve receta para suavizar tus manos naturalmente.
- Lava tus brochas de cosméticos regularmente (una vez al mes al menos), ya que éstos acumulan bacterias que entran en contacto con tu piel.
- Desecha las esponjas aplicadoras de maquillaje puesto que éstas guardan una gran cantidad de bacterias.
- Utiliza una pequeña espátula para aplicar las cremas que vengan en contenedor y evitar contaminarlas con bacterias de tus dedos.
- Haz ejercicio para eliminar las toxinas de tu cuerpo.
- Duerme suficiente, en promedio 8 horas al día es lo más recomendable.
- Adopta un estilo de vida positivo que te ayude a disminuir el estrés, el cual promueve acné, envejecimiento prematuro y otras afecciones de la piel. Ve ejercicios prácticos para reducir el estrés y dolor de cabeza.
EVITA ESTOS ERRORES QUE DAÑAN TU PIEL
Elimina estos malos hábitos que pueden provocarte irritaciones, acné y otras infecciones de la piel y envejecimiento prematuro.
- Dormir sin desmaquillarte. Usa aceites naturales vegetales para desmaquillar naturalmente.
- Usar jabón perfumado para lavar la cara. El jabón (sapo-onis) es un producto químico con alto contenido de productos animales como la grasa o sebo, y otros como sodio, potasio y ácidos grasos. Te recomendamos que NO UTILICES JABÓN ya que altera el pH de tu piel y si tienes acné, lo empeora.
- Tocar tu rostro con las manos sucias y frotar tus ojos; hacer ésto promueve acné y otras infecciones.
- Exprimir barros y espinillas, lo que ocasiona que las bacterias se extiendan a lo largo de toda tu cara empeorando el acné y dejando cicatrices.
- Aplicar cosméticos caducados.
- Utilizar cosméticos de otra personas, éstos deben ser únicamente de uso personal.
- Exponerte al sol sin usar protector solar.
- Fumar. Además de aumentar el riesgo de cáncer para el fumador y para los que lo rodean, este hábito hace parecer tu piel más seca y acelera el envejecimiento.
- Aplicar en tu piel cosméticos de probador. Está comprobado que éstos contienen gran cantidad de bacterias.
- Utilizar continuamente toallas limpiadoras para rostro y ojos (éstas sólo deben usarse ocasionalmente por ejemplo cuando estés fuera de casa).
Si ya leíste estos consejos, ahora sigue diariamente una rutina para cuidar tu cutis. Visita:
RUTINA DE LIMPIEZA, TONIFICACIÓN, HUMECTACIÓN DEL ROSTRO